Los trabajadores municipales aprobaron hoy la propuesta de aumento salarial de 26 por ciento para los próximos tres meses, luego de marchar por la mañana hasta la Delegación de Trabajo, donde mantuvieron una reunión con el Ejecutivo barilochense. Fue clave la negociación de una cláusula gatillo.
La sugerencia del intendente, Walter Cortés, de descontar el día a quienes no concurriera a su lugar de trabajo no caló en los empleados del Sindicatos de Obreros y Empleados Municipales (Soyem). Una nutrida columna de trabajadores marchó temprano hacia el Centro Cívico donde, tras una reunión con las autoridades, votaron en asamblea a favor de la propuesta.
“Los compañeros optaron por la tranquilidad”
“Los compañeros optaron por la tranquilidad”, definió en diálogo con BRC Brenda Morales, secretaria General del Soyem. Según lo acordado, los aumentos del sueldo básico -que serán acumulativos e ingresarán en el aguinaldo- serán del 10 por ciento en mayo, 9% en junio y 7% en julio.
“Tuvimos varios ofrecimientos y a través de las asambleas, del trabajo que se hizo interno, de las reuniones que se hicieron en la Delegación de Trabajo, se fue avanzando, fue mejorando bastante. Y bueno, esta última (propuesta) convenció a la asamblea”, señaló la dirigente.
Inicialmente el Municipio había ofrecido un aumento del 25% en tres tramos, pero los municipales contraofertaron una suba del 30% y el viernes último votaron a favor de movilizarse hoy al Centro Cívico.
Una cláusula para no perder con la inflación
Una de las claves para aceptar el aumento del 26%, señaló Morales, fue la incorporación de una cláusula gatillo. Según explicó, esta se activará “si la inflación es mayor al 7% en el mes de junio”.
En ese caso “nos estaríamos volviendo a convocar para poder ajustar el número. De tal manera que nos garantice que no quedemos debajo del índice que marca la inflación”, sostuvo.
En la previa de la marcha, declaraciones de Cortés habían caldeado el ambiente. El intendente dijo que a quienes no trabajasen se les descontaría la jornada laboral.
“Nosotros en ese sentido hicimos una presentación y hablamos con la gente de la Delegación, porque en realidad no es un paro ni es una retención de servicios. Y si lo fuera, tampoco corresponde (el descuento) porque son medidas que tienen que ver con la organización sindical”, destacó la titular del Soyem.
“La gente hoy fue a sus lugares de trabajo, fichó, se retiró para poder marchar. Una vez culminada la asamblea, volvió a sus lugares de trabajo y los servicios no se cortaron. En varias dependencias dejamos guardias mínimas. Así que no habría muchos argumentos para un descuento”, subrayó la dirigente.
En efecto, hoy la atención y los servicios se brindaron “con total normalidad”, informó el Municipio en un comunicado.