El Concejo Municipal aprobó en su última sesión la creación de un plan integral para mejorar la accesibilidad en la ciudad y eliminar las barreras físicas que afectan la movilidad de las personas con discapacidad. La nueva normativa, denominada “Plan de Mejoramiento de Transitabilidad Peatonal para Personas con Discapacidad”, busca abordar las deficiencias de infraestructura que dificultan el desplazamiento seguro y autónomo en Bariloche.
La Ordenanza reconoce en sus fundamentos que “la falta de infraestructura adaptada, el deterioro de vía pública y las complicaciones que se presentan por la irregular topografía de nuestra ciudad, limita considerablemente la posibilidad de trasladarse normalmente y pone en riesgo incluso la integridad física de las personas”.
Dada la importancia que reviste la autonomía e independencia para una persona, postula la Ordenanza aprobada a propuesta de los concejales de Incluyendo Bariloche, “el Estado Municipal debe promover, proteger y asegurar el goce pleno y en condiciones de igualdad de todos los derechos humanos y libertades fundamentales para todas las personas”.
Sin embargo, las personas con discapacidad “siguen encontrando dificultades para participar en igualdad de condiciones y desarrollar sus vidas con normalidad”, por lo que “se hace necesario” generar adoptar medidas específicas y concretas que busquen derribar “los impedimentos arquitectónicos y la poca infraestructura adaptada e inclusiva que existe, que complican y muchas veces hasta impiden, algo tan básico como es simplemente desplazarse de un lugar a otro en nuestra ciudad”.
Las principales mejoras
- Semáforos sonoros: Se establece la adaptación de todos los semáforos de la ciudad, los actualmente existentes y los que a futuro se coloquen, a semáforos sonoros. Este proceso deberá concretarse en un plazo máximo de dos años, con un mínimo de cuatro semáforos adaptados cada seis meses. La transición comenzará en las principales arterias de Bariloche y será la Dirección de Gestión para las Personas con Discapacidad la encargada de reglamentar el orden de prioridad en la adaptación de los semáforos.
- Aceras accesibles: La ordenanza también prevé la adaptación progresiva de veredas en zonas críticas de la ciudad, como las calles Clemente Onelli (alturas entre 300 y 1300 ambos lados), Francisco Pascasio Moreno (alturas entre 0 y 1000 ambos lados) y Ángel Gallardo alturas entre 0 y 1000 ambos lados). También donde se encuentren los centros de salud, hospitales y establecimientos educativos. Estas obras, que deberán completarse en un plazo máximo de cuatro años, incluirán rampas de conexión y baldosas Podo Táctiles, siguiendo los estándares nacionales de accesibilidad.
- Lectores táctiles en paradas de colectivos: En un esfuerzo por hacer el transporte público más accesible, se instalarán lectores informativos metálicos en sistema Braille en todas las paradas de colectivo existentes a la fecha y las que a futuro se coloquen y que cuentan con garita. Esta medida deberá implementarse en un plazo de dos años, con un mínimo de 10 lectores instalados cada seis meses.
- Concientización: Se encomienda a la Dirección de Gestión para las Personas con Discapacidad la realización de campañas de concientización sobre la aplicación y utilización de las normas establecidas en la presente ordenanza.