Estudiantes, docentes, investigadores y autoridades de las universidades nacionales de Río Negro (UNRN) y el Comahue (UNCO), con el apoyo de Unter, Ctera y otros gremios, se movilizaron este jueves por el centro de Bariloche para volver a denunciar el desfinanciamiento de las casas de estudio por parte del gobierno nacional, y en defensa de la educación pública en general.
En coordinación con los gremios y federaciones docentes de todo el país, que habían acordado para este jueves una jornada federal de movilización y paro general, los manifestantes se dieron cita en el Centro Cívico para marchar luego hacia la sede del Centro Regional Universitario Bariloche, de la UNCO.
A un mes de las masivas marchas en defensa de la educación que marcaron un punto de inflexión en la discusión pública, aunque con bastante menos asistencia que entonces, los reclamos volvieron a ser los mismos que entonces.
Aunque se sumaron también cuestionamientos sobre el tratamiento en el Senado de la Ley de Bases, que otorga al Presidente la posibilidad de disolver o fusionar organismos de ciencia y tecnología.
Asignaturas pendientes
Transcurrido este espacio de tiempo “no hemos tenido respuesta a ninguno de los puntos que planteaban las universidades, es decir, el aumento del financiamiento para los gastos de funcionamiento, los aumentos salariales, el aumento de los fondos para becas, el financiamiento para los distintos organismos de investigación o la continuidad de las obras de infraestructura”, enumeró a BRC Diego Aguiar, vicerrector de la Sede Andina de la UNRN.
“No se ha avanzado”, enfatizó, y acotó: “Solamente la UBA obtuvo un aumento para uno de esos puntos, los gastos de funcionamiento. Pero bueno, el resto de las universidades no hemos tenido ese beneficio. Ahora se está pidiendo por todos estos puntos”.
Además, recordó que la Universidad de Buenos Aires “tiene el 15%” de los estudiantes de todo el país. De un total de 2 millones, “la UBA tiene 300.000. Así que se trata de una partecita chiquita nada más, que está en Capital Federal”.
El último martes, el vocero presidencial Manuel Adorni dijo que el Gobierno había llegado a un acuerdo con las universidades nacionales para actualizar en un 270% los gastos de funcionamiento de todas las casas de estudio. Pero el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) aclaró inmediatamente que si bien hubo conversaciones, no se firmó ningún acuerdo.
Consultado al respecto, Aguiar confirmó que hay una reunión prevista para la próxima semana entre el CIN y la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, para conversar sobre esos puntos. “Por trascendidos que hay en los medios, el Gobierno Nacional quiere trabajar sobre un punto nada más, que son los gastos de funcionamiento. Pero bueno, en concreto, al día de hoy, jueves, no hay nada firmado sobre ese aumento”.
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Consecuencias del desfinanciamiento
Aguiar sostuvo que a raíz de la escasez de fondos nacionales, la Sede Andina de la UNRN tuvo que dar de baja las “recursadas”, un conjunto de asignaturas que por su mayor dificultad, se dictaban dos veces en el año. “Ya no las podemos dictar más, los alumnos tienen menos posibilidades de avanzar en la carrera”, cuestionó.
También “hemos tenido que prácticamente eliminar el área de deportes”, un espacio clave para la construcción de vínculos entre alumnos, continuó Aguiar.
En la lista de restricciones entraron además las salidas a campo, fundamentales en carreras como Licenciatura en Agroecología o Turismo, además de los insumos de laboratorio, entre otros puntos
Y “hemos perdido alquileres. Acá hay edificios que alquilamos para dictar clases y hay uno que ya no podemos alquilar más. Y otro que corre peligro en El Bolsón”.